Si nos atenemos a la cantidad de dinero que tenemos que desembolsar anualmente en conceptos variados para atender a nuestro coche, no lo compramos. Solo en impuestos, desde que salimos del conce, nos vamos a gastar una «pasta gansa». Seguidamente os daré un recordatorio de impuestos que afectan al coche para que os hagáis una idea del coste, sólo por ese concepto. Como os vengo diciendo, hay varios tributos que gravan de manera directa o indirecta a tu coche; y es que en España, esto de recaudar a saco para luego construir rotondas absurdas o aeropuertos vacíos, nos encanta. ¡Ahhh, no, que ya no están vacíos!. Bueno; al tema. Los impuestos principales que se cargan sobre un coche son, por un lado, el de matriculación, que grava el vehículo una sola vez, ¡pero de qué manera!. Este impuesto se paga a la primera matriculación del coche y tiene los siguientes tramos según el nivel de emisiones de CO2 que presento en este cuadro:
EMISIONES | PORCENTAJE IMPUESTO |
Menos de 120 g/km de C02 | 0 |
121-160 g/km de CO2 | 4,75% |
161-200 g/km de CO2 | 9,75% |
Más de 200 g/km de CO2 | 14,75% |
No todos los vehículos deben pagar este impuesto ya que algunos están exentos o sujetos a reducciones, pero la inmensa mayoría de los mortales debemos pagarlo religiosamente.

Siguiendo la ruta impositiva, nos encontramos ahora con el popular IVA. El tipo de IVA general es del 21% para la Península e Islas Baleares. Si vives en Ceuta o Melilla, tendrás el IPSI que asciende a un 10 % y en Canarias, gozarás del IGIC, con su tipo general del 13,5 %, que se nota y mucho a la hora de comprar un vehículo, aunque no dejan por eso de ser impuestos. La verdad es que desconozco cuáles son las políticas de ventas en Ceuta y Melilla (si a la hora de comprar un coche te descuentan en la factura ese 11 % de diferencia o te cobran lo mismo que si te lo comprases en Bilbao con su 21 % de IVA). Aprovecho estas líneas para denunciar que aqui, en Canarias, algunos concesionarios te cobran la misma factura por tu nuevo coche que si lo adquirieras en Madrid o en Sevilla, por poner dos ejemplos de ciudades sujetas al IVA. Esta cuestión ha sido expuesta en sede de concesionario por mi parte en varias ocasiones a lo largo de los últimos años y las respuestas han resultado de lo más variopintas. Para ir al grano, os diré que, en algunos concesionarios en Canarias, directamente te cobran el 21 % del equivalente al IVA peninsular (porque no pueden cobrar IVA, como es evidente). Si alguien que lea este post tiene alguna explicación para esto que no sea directamente la de ser un «robo a mano armada», que lo explique en mensaje o como quiera, pero que no se corte, que para eso está el blog también.
A todo esto, hay excepciones que no deben pagar o que pagan una mínima cantidad impositiva, como por ejemplo, quien acredite minusvalía igual o superior al 33 %, etc. Las empresas también son beneficiarias de deducciones, etc, pero, vuelvo a repetir, que la mayoría de los mortales pagamos y pagamos a base de bien.

Otro impuesto sería el de Vehículos de Tracción Mecánica, que es directo y que se paga por ser propietario de un vehículo. Se trata de un impuesto cedido a los ayuntamientos y algunos casos no tributan por él, como por ejemplo los vehículos de transporte de personas con movilidad reducida, entre otros. El importe básicamente va a depender de la potencia fiscal del coche.
Ya a otro nivel, hablaríamos del Impuesto sobre el Patrimonio que, en circunstancias normales, no habrá de satisfacerse, salvo que tengamos mucho dinero y bienes. Sobre el I.R.P.F., habría que señalar que, al ser un tributo que grava las rentas, si vendes el coche y eres capaz de ganar dinero (casi imposible, salvo excepciones), tendrás que tributar el incremento por este concepto, así que nada de nada.
Para terminar, el impuesto que más nos toca pagar a diario, es el que nos meten en las gasolineras cada vez que vamos a llenar el tanque. Se llame IVA, IGIC o IPSI, terminarás pagando un elevado porcentaje (sobre todo en el caso del IVA) por echar carburante, ya que el impuesto especial sobre los hidrocarburos se configura como una de las «joyas de la corona» del Estado, junto al tabaco o las bebidas alcohólicas.
Ese mismo «azote cotidiano» del ciudadano llamado IVA, IGIC, etc, será el que nos grave una vez más cada vez que reparemos el coche, cambiemos un neumático o metamos en un túnel de lavado nuestro modelito para que reluzca. Como véis, es un no parar de pagar impuestos. ¿No os lo dije al principio?.
Gracias por compartir toda tu experiencia.
De nada. Trato de hacer lo que puedo dentro de mis conocimientos y posibilidades.
Un saludo.