Conducción adecuada y español al volante no son términos muy parejos. Muchas veces, mientras doy un paseo o conduzco, me quedo asombrado de las malas prácticas de conducción españolas. Habitualmente hacemos crítica feroz en relación con la costumbre demasiado recurrente de la Administración por meternos la mano en el bolsillo, pero es que, viendo lo que se ve, hasta termina pareciendo lógico que los distintos gobiernos nos breen a palos dada nuestra insistencia en conculcar las normas de tráfico; la verdad es que me fastidia como español decirlo, pero somos pertinaces a la hora de transgredir todo aquello que huela a norma o a regulación legal.
Voy a pasar a listar los peores hábitos de los españoles a bordo de un vehículo, bien sea éste de dos, cuatro o más ruedas. Como este artículo lo escribo yo, soy quien decide el orden en que los expongo que irá descendiendo de más deplorable a menos.
- Intermitente (¡qué pena me das!): ¿Pero cómo es posible que en este bendito País haya tantísimos conductores que no usan este dispositivo fundamental cada vez que realizan una maniobra que requiere de su utilización?. Es realmente insultante observar cómo un gran número de irresponsables al volante (no merecen el calificativo de conductores) se desplazan lateralmente delante de tus narices sin activar el intermitente; muchas veces pienso que deben de creerse que están ellos solos en la ciudad / calle / carretera… pero pronto me percato de que no es eso, sino el asqueroso egocentrismo patrio sumado a la absurda creencia que tiene el españolito típico, de poseer unos conocimientos al volante que no posee nadie más en un millón de años luz alrededor de la galaxia. Este cocktel peligrosísimo permite comportamientos tales como cambios de carril, incorporaciones, giros, maniobra de aparcamiento,
INTERMITENTE (VIENEN INSTALADOS DE SERIE EN TODOS LOS VEHÍCULOS) adelantamientos o abandono de rotondas sin tocar la palanca del intermitente ni una sola vez. Esto no es cosa de hombres o mujeres, ya que ambos sexos cometen esta infracción por igual, al menos, desde mi ya abultada experiencia en esta lides. ¿Y cuál es la causa de mi cabreo con esta gente que se salta a la torera tan sencillo y necesario gesto?. Básicamente se trata de cooperar con el resto de las personas que comparten la vía pública contigo. No estás solo / sola y, por tanto, estás obligado / obligada a cooperar y a señalar al que va detrás o delante de ti cuáles son tus intenciones, porque ¿sabes qué?, LOS DEMÁS NO SOMOS ADIVINOS NI ESTAMOS INCRUSTADOS EN TU ESTÚPIDO CEREBRO. Es fácil de entender, ¿no?. Señalizando nuestras intenciones de manera anticipada, seremos capaces de evitar sustos, accidentes e hinchazón de narices de quien vaya en ese momento detrás de ti soportándote. Pido encarecidamente desde estas líneas a las autoridades competentes que multen sin tino a estos descerebrados que ponen en riesgo cierto las vidas de otros que sí respetan las más elementales normas de tráfico. ¡Quítenles puntos, sanciónenles a ver si así espabilan y se les enciende la neurona del cooperativismo y la colaboración social!. Es que estoy harto de ver policías de unos y otros cuerpos con competencias en asuntos de tráfico, presenciando cambios de carril y maniobras de todo tipo que requieren de accionar la palanquita, sin inmutarse al respecto, probablemente porque en España, aún siendo una infracción contemplada en el Reglamento de Circulación, no está mal visto que esto se haga, aunque luego nos despachemos con noticias recientes como éstas. No voy a dejar este punto sin recordar a todo el que me lea, que el Art. 109 del Reglamento de Circulación dice lo siguiente:
Artículo 109. Advertencias ópticas.
1. El conductor debe advertir mediante señales ópticas toda maniobra que implique un desplazamiento lateral o hacia atrás de su vehículo, así como su propósito de inmovilizarlo o de frenar su marcha de modo considerable. Tales advertencias ópticas se efectuarán con antelación suficiente a la iniciación de la maniobra, y, si son luminosas, permanecerán en funcionamiento hasta que termine aquella.
2. A los efectos del apartado anterior, deberá tenerse en cuenta, además, lo siguiente:
a) El desplazamiento lateral será advertido utilizando la luz indicadora de dirección correspondiente al lado hacia el que se va a realizar, o el brazo, en posición horizontal con la palma de la mano extendida hacia abajo, si el desplazamiento va a ser hacia el lado que la mano indica, o doblado hacia arriba, también con la palma de la mano extendida, si va a ser hacia el contrario.
En las maniobras que impliquen un desplazamiento lateral, es éste el que exclusivamente se avisa, por lo que la advertencia deberá concluir tan pronto como el vehículo haya adoptado su nueva trayectoria.
b) La marcha hacia atrás será advertida con la correspondiente luz de marcha atrás, si dispone de ella, o, en caso contrario, extendiendo el brazo horizontalmente con la palma de la mano hacia atrás.
c) La intención de inmovilizar el vehículo o de frenar su marcha de modo considerable, aun cuando tales hechos vengan impuestos por las circunstancias del tráfico, deberá advertirse, siempre que sea posible, mediante el empleo reiterado de las luces de frenado o bien moviendo el brazo alternativamente de arriba abajo con movimientos cortos y rápidos.
Cuando la inmovilización tenga lugar en una autopista o autovía, o en lugares o circunstancias que disminuyan sensiblemente la visibilidad, se deberá señalizar la presencia del vehículo mediante la utilización de la luz de emergencia, si se dispone de ella, y, en su caso, con las luces de posición.
Si la inmovilización se realiza para parar o estacionar deberá utilizarse, además, el indicador luminoso de dirección correspondiente al lado hacia el que vaya a efectuarse aquella, si el vehículo dispone de dicho dispositivo.
3. Con la misma finalidad que para las acústicas se señala en el artículo siguiente y para sustituirlas podrán efectuarse advertencias luminosas, incluso en poblado, utilizando en forma intermitente los alumbrados de corto o de largo alcance, o ambos alternativamente, a intervalos muy cortos y de modo que se evite el deslumbramiento.
- El móvil y su enfermiza dependencia: ¡Qué queréis que os diga al respecto!. ¿No lo habéis visto cuando vaís por ahí?. ¿No lo hacéis alguno de vosotros de vez en cuando…?. Este comportamiento me parece bastante deplorable también puesto que implica la desaparición de la atención plena que requiere una conducción segura. Pero parece ser que aquí da lo mismo que a uno le quiten puntos y le sancionen económicamente por semejante comportamiento. Cada vez que salgo a la calle soy capaz de volver a casa varias horas después contabilizando decenas y decenas de conductores y conductoras díscolos que hacen caso omiso de la normativa reguladora. Es tremendo ver cómo gran número de
USO DEL MÓVIL CONDUCIENDO. UNA OPCIÓN APTA PARA LLEVARNOS DIRECTOS AL CEMENTERIO conductores van pendientes de sus móviles en marcha, mirando hacia abajo y a velocidades que, a veces, ponen en gravísimo peligro la circulación general, ya que realizan estas conductas en autovías y muchas veces, a velocidades que superan en bastante la legal de 120 Km/h. ¿Alguien ha caído en la cuenta del número de metros que se pueden recorrer a 150 Km/h mientras manipulamos un móvil, digamos, durante 5 segundos sin mirar a la calzada?. A mí me salen algo más de 200 metros. Creo que con esto ya lo he dicho todo; cada cual que imagine las consecuencias de ir mirando el móvil a 150 Km/h y que surja un imprevisto en ese lapso de tiempo.
- Luz de cruce en garajes: ¿qué es eso?: entrar en un garaje público o privado y encontrarte de frente en la rampa con alguien que no lleva puestas las luces, no tiene precio. Otra inmensa falta de colaboración y de pensamiento social. Si yo llevo las luces puestas, tú me ves a mí aunque haya una curva de por medio, pero si tú las llevas apagadas, ¿qué más da que yo me la pegue contra ti por no haberte
APARCAMIENTO PÚBLICO. LA SEÑAL DE LA DERECHA SIGNIFICA USO OBLIGATORIO DE LA LUZ DE CRUCE visto?. ¿No véis que es de idiotas?. Pues hay gente que no lo entiende. Además, estamos hablando de una obligación, no de algo facultativo que uno dispone a su criterio. Pues a pesar de ello, un gran número de irresponsables al volante de un vehículo, se lo siguen pasando por el forro de aquellas partes.
- El «warning»: esa excusa para todo: no hace muchos meses circulaba yo por una avenida de la ciudad en mi coche, cuando de repente me encuentro a unos cien metros un coche que tenía encendidas las luces de emergencia, también conocidas con el anglicismo «warning», parado en uno de los carriles (la avenida tenía dos carriles). Era tal la falta de respeto por los demás y la ausencia de materia gris en el cerebro de aquel irresponsable que protagonizó la escena, que no sólo dejó el coche parado en un carril,
MAL APARCADO. SI PASA UN PEATÓN O UNA SILLA DE RUEDAS, NO PASA NADA PORQUE «HE PUESTO EL WARNING» sino que, como además era muy malo aparcando, su vehículo invadía prácticamente la mitad del carril que dejó operativo con su actuación, por lo que, no sólo no se podía circular por el carril que invadía habiendo detenido ahí su coche, sino que casi no dejaba circular tampoco por el único carril que quedaba libre. El chaval se había detenido allí para esperar a su chica que se había apeado del coche para comprar unas chuches en un kiosko que había al lado. Cuando pasé a su altura le dije que estaba estorbando allí y que se moviera algo más adelante para permitir la libre circulación (al menos en un carril). Su respuesta no se hizo esperar y además fue en lenguaje de signos. Me participó que, pese a estar molestando a todo dios, no había problema, PORQUE ESTABA ENCENDIDO EL «WARNING». Repetidamente hacía gestos con los diez dedos de las dos manos simulando intermitencias extendiendo y contrayendo los mismos, al tiempo que se encogía de hombros para hacer saber a todo el mundo que aquello no iba con él PORQUE TENÍA ENCENDIDAS LAS LUCES DE EMERGENCIA y esa acción le exculpaba de toda responsabilidad. Sin luces de emergencia encendidas, molestas, pero si las enciendes, por lo visto el coche se hace transparente y los demás podemos pasar a través de él. Pensé enseguida: -a este retrasado mental le dieron el carné en una tómbola y ahora nos toca a los demás aguantar su infinita estupidez-. Por favor, agentes de la autoridad, estén pendientes de este tipo de sujetos, porque son peligrosos. Ya sé que cuando ustedes aparecen, ellos quitan el warning y hacen mutis por el foro, pero téngalos a raya porque son muy molestos y además abundan.
- El carril de la izquierda: ¡mío,mío y mío!: ¿Pero quién le ha dicho a la gente que el carril de la izquierda es para circular?. No es poco habitual encontrarte en una autovía o autopista a alguien que circula tranquilamente por el carril de la izquierda y que lo lleva ocupando desde que los dinosaurios se extinguieron. No lo abandonan jamás, como si les perteneciera a ellos / as. Son gente que suele tender bastante al autismo, puesto que si les pitan para que se aparten o les señalizan que deben quitarse de ese carril para dejar paso a los demás, no se enteran de nada, continuando con su particular viaje por el que parece ser el
COMO TODO EL MUNDO SABE, EL CARRIL DERECHO DEBE IR VACÍO Y EL CENTRAL Y EL IZQUIERDO A TOPE. ¡QUÉ PACIENCIA…! único carril válido para ellos / as para circular. Solamente he visto maniobrar hacia el carril central y luego hacia el derecho con absoluta pulcritud (accionando los intermitentes y todo) a alguien que llevaba media hora martirizando al resto de conductores, cuando apareció una pareja motorizada de la Guardia Civil de Tráfico; ya sabéis cómo suelen aparecer estos, de repente, con nocturnidad y alevosía y de la nada. Creo que en la Academia les enseñan teletransportación, porque no es posible verlos por el retrovisor y quitar la vista del mismo un segundo y ya no verlos o no verlos y de repente encontrártelos al lado de la ventanilla mirándote para ver qué tal llevas el día. La verdad es que estos fenómenos requieren de un capítulo aparte que algún día abordaré en otro post. El caso es que son efectivos y es aparecer ellos y desaparecer el plasta de turno del carril izquierdo al instante. Algunos, muy imbuídos en su mundo propio, ni se enteran, pero es ponerse el motorizado al lado de la ventanilla haciéndole gestos de que se incorpore a la derecha y ¡dicho y hecho, oiga!. Debería haber muchos más de esos en la carretera y menos camuflados jugando al «que te pillo». Los primeros son mucho más efectivos, aunque es cierto que los segundos recaudan más.
Podría seguir con varias acciones más que crispan los nervios de cualquiera, como la circulación en glorietas o la gente que aparca su coche en los garajes públicos acaparando dos plazas para que no se ponga nadie al lado o los que aparcan en plazas de minusválidos sin serlo, pero me tengo que marchar, así que otro día a lo mejor me animo y os cuento algo más sobre estos incívicos. Hasta entonces, espero os lo hayáis pasado bien leyendo esta entrada. Ni que decir tiene que si alguien quiere compartir experiencias de este tipo, lo haga con total libertad, que el blog no quema y está para eso.
Muy buen, artículo, y ya que lo mencionas, me encantaría un artículo sobre las rotondas » esas grandes desconocidas» y las llamadas turbo rotondas
Gracias. Supongo que algo de lo que has leído ya lo has experimentado en carne propia, ¿no?. Las rotondas podrían generar un artículo del tamaño de la Biblia y sus múltiples traducciones, pero lo haremos un día de estos.
Gracias por seguirme.