
El «Diéselgate», como así se conoce al escándalo protagonizado en las últimas semanas por el Grupo VAG, lleva camino de convertirse en el «Gasoldiegate» (de gasolina y diésel). Según las últimas investigaciones, también habría vehículos afectados por el escándalo cuyos motores son de gasolina. Pero lo importante aquí, visto lo visto, es hacernos una pregunta; Grupo VAG. ¿Y ahora qué?.
Como dicen, eso sí, cuando nadie les escucha, los técnicos de motores, a estas alturas de desarrollo LA MAGIA NO EXISTE, por lo que, salvando algunas soluciones de cámara de combustión muy innovadoras y caras, un motor no puede simultáneamente correr más que la competencia, gastar menos combustible y emitir menos agentes nocivos que sus rivales equivalentes, porque sencillamente es imposible.

Verdaderamente nos encontramos ante una vergüenza de dimensiones estratosféricas, teniendo en cuenta la masiva estafa mundial protagonizada por estos señores alemanes que todo lo son y todo lo saben, que tan pulcros y serios nos venden sus gestiones y sus modelos de negocio (esto era hasta hace unas semanas, lógicamente). Añadiré que, una vez chequeados los coches afectados por la estafa, ya no rendirán lo mismo que cuando llevaban acoplado el «invento», por lo que, desde mi punto de vista, la estafa del Grupo VAG será DOBLE. Por un lado me vendieron un coche trampeado y ahora que se ha descubierto el pastel, me ponen un parche que resta prestaciones al modelo. Esto en mi pueblo significa, ni más ni menos, que te han engañado dos veces y eso puede terminar significando asimismo, que eres gilipollas un pelín confiado.
El grupo VAG tiene (o eso nos dicen) recursos suficientes para hacer frente a semejante tomadura de pelo, ya que, sin ir más lejos, en 2014 los beneficios ascendieron a más de 15.000 millones de €; además, cuentan con fondos propios bastantes para cubrir lo que se les avecina.

Pero no todo es malo, ya que haciendo un análisis somero de la situación, diríamos que como debilidades, el Grupo VAG presenta en estos momentos las comentadas de los gastos ingentes que se avecinan, sumados a algo que se producirá a medio plazo y que ya se está incluso produciendo, que es el deterioro brutal de la imagen de marca. Las ventas del último mes cantan, aunque para no enrollarme, diré únicamente que la todopoderosa marca Volkswagen ha sido batida por Peugeot en coches vendidos. El primer mes completo tras conocerse el fraude del Grupo VAG, ha sido el pasado octubre y Volkswagen perdió el liderazgo en las preferencias de los compradores en favor de la francesa Peugeot, que vendió 167 vehículos más que la alemana (6.532 frente a 6.365 unidades). No obstante, Volkswagen mantiene, de momento, la primera posición en el listado de ventas acumuladas en 2015.
Sin embargo, como oportunidades veo que, otras marcas que timaron a sus clientes y que fueron condenadas, perdieron dinero, pero siguen contando con un prestigio elevado en el mercado americano. Me refiero a General Motors, cuando la empresa sabía que te estaba colocando un coche con el que te podías matar ante el escándalo de las llaves de contacto que se salían de la posición de encendido. Toyota, por su parte, sabía que sus pedales de acelerador causaban accidentes mortales. Ambos casos quedaron demostrados y fueron de dominio público, pero ambas marcas conservan la querencia de los usuarios estadounidenses y no son las únicas. Las ventas se vieron muy poco afectadas por los escándalos citados porque, a la postre, el cliente compra un vehículo, por estética, por simpatía, porque la mujer lo elige o porque la niña ha dicho que el coche mola mazo. Si entra en los cálculos de precio, la marca no importa tanto. La oportunidad, por otra parte, vendrá de la completa renovación del establishment privado del Grupo, cambiando de arriba a abajo la estructura de cargos y responsables que han sido cómplices de la vergüenza y cambiando el sello de calidad del Grupo ofreciendo producto de verdadero valor añadido, sin cobrarte un 30 % más sobre marcas generalistas por darte coches sucios y trampeados.

Audi, que entonces no pertenecía al Grupo VAG, ya tuvo mala prensa hace muchos años por los supuestos problemas de aceleración involuntaria en sus modelos 5000. En el año 1986 un programa de la CBS llamado “60 seconds” dijo que este coche tenía problemas de aceleración involuntaria y estaba directamente relacionado con la producción de 700 accidentes y de siete muertes. Se presentó el asunto como que el coche tomaba consciencia de sí mismo, los frenos dejaban de funcionar y el acelerador se volvía loco. El miedo contra Audi tuvo consecuencias desastrosas. La gente empezó a perder confianza en el coche. Audi insistía una y otra vez en que ningún coche aceleraba solo o fallaba por la causa denunciada por el programa televisivo. Las víctimas aseguraban que pisaban el freno con todas sus fuerzas, pero no paraban. Pasados 3 largos años la NHTSA falló a favor de Audi, concluyendo lo mismo que la marca: era un problema de la gente, que aceleraba sin darse cuenta al ir a pisar el freno. Los coches americanos, casi todos automáticos, tienen un pedal de freno enorme y un acelerador pequeño. Los coches europeos, como el Audi 5000, tenían el pedal de freno más pequeño y próximo al acelerador. El valor de reventa de esos coches cayó a nada y menos y ni que decir de las ventas. La marca intentó reaccionar dando más garantía y retomando los nombres europeos 100 y 200, pero no sirvió. El amparo de la NHTSA llegó demasiado tarde y el daño ya estaba hecho. La marca no tomó el camino fácil, que en comercio siempre es el difícil y que no era otro que el de sugerir que sus clientes eran unos perfectos imbéciles poco hábiles al volante, decantándose por aquella vieja máxima de “el cliente siempre tiene la razón”. Todo esto estuvo a punto de costarle la desparación a Audi del mercado americano, no volviendo a recuperarse hasta diez años después. Aquella «estupidez» costó un daño en la reputación a Audi de tal envergadura, que aún hoy está pagando a nivel mundial las consecuencias. La clara percepción por parte de los usuarios de que Audi es una marca de segunda frente a las dos dueñas del podio alemanas, Mercedes y BMW, es patente. Pertenecer al Grupo VAG es una de las causas, aunque no la única. Es una lástima, porque Audi estaba empezando a levantar cabeza con modelos realmente atractivos y bien hechos, entre los que destaca el súper ventas A3 Sportback TDI. La imagen de Audi está en peligro real como marca Premium y todo dependerá de la habilidad de los departamentos de márketing para reflotarla de nuevo, pero como véis, no es la primera vez que tienen problemas muy serios. Lo que está claro es que Audi parece gafada en aquel País.

Respecto a la oportunidad del Grupo VAG de vender marcas serias después de hacer las trampas que han hecho, os diré que va a tener muy cuesta arriba volver a hacerse con un puesto respetado en este sentido. El extremo de retomar el tema de la mínima contaminación y de presentar coches limpios, parece, sin embargo, más fácil de encauzar, aunque será tarea titánica, sin duda. Todo esto pasará necesariamente por la implantación a marchas forzadas de la tecnología Plug-in hybrid, eléctricos y energía más limpia (de la de verdad), que ya estaban posicionando en el mercado y que ahora tendrán que acelerar les guste o no. El Golf GTE o el A3 Sportback e-tron son buena prueba de que el Grupo VAG sabe hacer muy bien coches eficientes. Es eso, o seguir vendiendo que eres muy ecológico lanzando basura a la atmósfera sin tino y «a ver si no me pillan» ¡Ayyyy Grupo VAG, Grupo VAG!.
En este sentido, comentar que la alternativa al diésel es cada vez más numerosa, rentable y apuesta ya por tecnología que permite grandes distancias que cubrir sin necesidad de enchufarte. Calculo que de aquí a 2040 los coches diésel serán historia. Es evidente que hay que apostar por otro tipo de energías y que hay que invertir mucho dinero en ello. ¡Lo del TDI ecológico ya no cuela!. ¿Estará el Grupo VAG entre los mejores del mercado en este tipo de motorizaciones?. La respuesta para mí es que, o estará, o desaparecerá sin piedad. Como siempre, el tiempo es el mejor juez y nos lo dirá gratis.
Buenas Luís, he leído tu artículo y me gustaría hablar contigo un remapeo qué me ofrece una marca de coches y no se lo que hacer.
Por favor puedes ponerte en contacto conmigo y darme tu opinión.
Un cordial saludo.
Óscar Yagüe
Buenas noches Óscar. Por supuesto que me puedes consultar lo que quieras. Yo intentaré darte mi humilde opinión sobre el asunto si sé de qué me hablas. Si no, te buscaría la forma de informarte adecuadamente sobre el tema que te preocupa. Dime qué te han ofrecido y sobre qué vehículo y te comento lo que sepa al respecto.
Un saludo.