El DS3 E-Tense es un compacto del segmento premium refinado en su andar y en su estética exterior y interior.
Se trata del primer coche eléctrico de la firma de lujo francesa que deja atrás a la marca de la que deriva del extinto Grupo PSA, afianzándose ya en el Grupo Stellantis como propia y autónoma respecto de Citroën.
Una gama completa que será eléctrica a partir de 2025 y que ha sido inaugurada por el DS3
El DS3 E-Tense Crossback ha sido el primero en inaugurar la era eléctrica total de la marca. Según DS, todos los coches de la firma serán completamente eléctricos a partir de 2025 y eso implica al DS4, al DS7 y al DS9, actualmente con versiones de combustión e híbridas enchufables.
El modelo DS3 también se comercializa en la actualidad con versiones térmicas, aunque la probada en esta ocasión es la eléctrica 100%.
A día de hoy, existe una versión actualizada del DS3 probado con un ligero «restyling» tanto exterior como interior a fin de mantenerlo al día.
Un ejemplo de avance en el nuevo modelo respecto de éste, es que la batería tiene en el nuevo mayor densidad energética y una capacidad superior, con casi 51 kWh netos.
Con esta actualización, el DS3 pasa de recorrer 342 Km bajo ciclo WLTP a superar los 400 por poco, lo que para un vehículo de su segmento representa un muy buen dato
Como ya he comentado, los cambios son ligeros respecto del modelo de la prueba, pero sí hay que destacar en favor del actual su mayor autonomía y su aumento de potencia (156 CV del modelo nuevo frente a los 136 CV del modelo que hoy pruebo).
Exteriormente los cambios son de matiz, añadiendo al DS3 nuevo una nueva firma lumínica, unos faros con un diseño más actual y una parrilla ligeramente más ancha.
Desde el punto de vista interior, los cambios son algo mayores, incluyendo el sistema de conexión para Android Auto y para Apple CarPlay de manera inalámbrica, siendo por cable en el modelo probado.
Además, el volante del actual incluye más funciones que éste y el sistema multimedia varía bastante, aunque el tamaño de la pantalla no cambia, quedándose en las actuales 10,3″, que para lo que se ve últimamente, hasta parece pequeña.
En cuanto a la potencia de carga del motor eléctrico no hay cambio alguno, admitiendo hasta 11 kW en alterna y hasta 100 kW en continua.
DS dice que el consumo medio de este coche asciende a una media de 17,6 kWh y esto se acerca bastante a lo experimentado por mí , moviéndome en el entorno de los 16 / 17 kWh cada 100 Km.
Compacto, refinado y muy bien equipado. Una tríada perfecta para llevarse más ventas de las que hasta ahora viene cosechando
El DS3 Crossback (el actual se llama DS3 a secas) es un vehículo compacto, con 4,12 metros de longitud, 1,79 metros de anchura y casi 1,54 de altura; estas características lo convierten en un modelo cómodo para callejear, ideal para aparcar y al ser alto, también muy accesible a la hora de salir y entrar.
El maletero cubica unos buenos 350 litros, por lo que la carga de equipaje tampoco es un problema, siempre y cuando seamos mesurados, claro.
Entre su equipamiento destacado puedo citar elementos como las manillas enrasadas automáticas que emergen o se esconden según te acercas o te alejas del coche, el climatizador, el navegador, la pantalla central multimedia de 10,3″, la tapicería en piel, los faros full LED o el cuadro de instrumentos digital con un HUD que, a mi juicio, no es nada premium al sostenerse sobre una lámina de plástico que emerge del salpicadero. Un HUD de este nivel es muy cutre para un coche tan refinado. ¡Cambien eso ya, por favor!.
Tres modos de conducción: Sport, Confort y ECO, siendo el modo Sport el único en el que disponemos de la potencia total del motor
Si queremos disponer de la máxima potencia del DS3 Crossback E-Tense, tenemos que ir en modo Sport, ya que ésta es la única forma de sacar el jugo al motor de 100 kW (136 CV).
De no ser así, en los modos ECO y Confort, el coche ofrecerá como máximo 80 kW (alrededor de 109 CV), suficientes para callejear y para salir por ahí sin temor a quedarnos tirados a los 150 Km porque se nos ha agotado la batería antes de lo previsto.
Su hábitat natural es la ciudad, aunque da para bastante más que eso
El lugar de uso preferido para este crossback de DS es la ciudad y su entorno. Esto es así en el 70% de los coches eléctricos actuales. Sin embargo, creo que este coche da mucho de sí sacándolo a pasear por autopista aunque sea en distancias que no se vayan más allá de los 200 Km más o menos.
En una Isla, como en la que se lleva a cabo la prueba, da igual la autonomía que tengas, siempre y cuando puedas contar con tu enchufe o terminal WallBox en tu garaje, para no depender de la aún muy escasa oferta de cargadores.
En el modo Sport se nota el empuje de un coche eléctrico que no es brutal, pero sí es contundente. Son 8,7 los segundos que tarda este DS3 en hacer el 0 a 100 Km/h, pero donde realmente se nota la «patada» es en el 0 a 50 Km/h, suficiente para dejar atrás a casi cualquiera a la salida de un semáforo.
La velocidad máxima se limita a 150 Km/h, que no es gran cosa, pero en España puedes acabar en la cárcel por ir a esta velocidad en según qué tramos de autovía.
Confort muy elevado y rodar muy placentero para un segmento B que casi es un segmento C por tamaño
En definitiva, este DS3 es un coche muy recomendable para la ciudad y más allá de la ciudad, siempre y cuando no pretendas hacer largos viajes, para lo que te valdrá cualquier coche de combustión, aunque muy pocos de propulsión eléctrica.
Poder coger un coche eléctrico con la tranquilidad de marcharte 400 ó 500 Km sin preocuparte de la autonomía, está hoy en día en manos de muy pocos modelos cuyos precios son casi prohibitivos y sus tamaños nada tienen que ver con el segmento B.
El DS3 Crossback E-Tense está pensado para ser un urbanita de lujo e ir incluso más allá de la ciudad aportando una conducción muy placentera y segura a todo confort.
Su rodar es tranquilo y muy cómodo, con una suspensión blanda que se traga los baches de una forma increíble para el segmento del que hablamos y con un nivel de sonoridad interno casi nulo, aunque a alta velocidad el ruido del viento se deja notar más de lo deseable, a mi juicio.
Con el nuevo DS3 E-Tense todo mejora, sumando potencia, autonomía y tecnología que nunca está de más a tenor de cómo está el mercado
Y es que si te duermes no sales en la foto de los mejores. Esto en la vida es así por regla general, por lo que DS ha reforzado el buen hacer de este DS3 para mantenerlo vivo y mejorar aquellos elementos en los que el modelo que pruebo hoy no despunta.
Con una potencia de 156 CV, una autonomía de 404 Km con una recarga y una puesta al día de los sistemas multimedia, creo que esta opción es más que recomendable para aquellos que busquen un coche premium del segmento B (casi C), a un precio que, sin ser asequible, te permite acceder a un nivel importante a la categoría de los ya de por sí carísimos coches eléctricos.
El precio de partida de este DS3 se sitúa en el entorno de los 39.000 € en su versión básica denominada «Bastille», precio que en Canarias puede estar en el entorno de los 32.000 por aquello de los impuestos y que según campañas y ayudas del Gobierno podría acercarse más a los 30.000 €, aproximadamente o incluso algo menos.
¿Barato?. No. Pero es que hace tres años un segmento B generalista de gasolina costaba 9.000 € y ahora no bajan de 16.000 €, por lo que si no te has ubicado ya en esto de la subida masiva de todo lo habido y por haber en el Planeta, deberás hacerlo si no quieres que te dé un soponcio.
Os dejo por aquí la valoración que hace EuroNcap de la seguridad de este DS3 Crossback.
Seguidamente, os dejo el cuadro de calificaciones que le pongo a este gran modelo francés del segmento B premium.
Finalmente, aporto el vídeo de rigor para darnos una vuelta juntos.